viernes, 24 de febrero de 2017

La Noche Oscura de san Juan de la Cruz

Por: Francisco Javier Sancho Mas
Fuente: LaPrensa.com.ni
Hace mucho, un fraile pobre de Castilla estaba a punto de morir en una celda, castigado y oprimido por sus propios hermanos y los oídos sordos del poder político de la época. Durante casi nueve meses lo tuvieron preso a base de poco pan, mucho frío y el hábito plagado de piojos. Su celda apenas medía metro y medio de ancho, y solo entraba luz por una rendija de dos dedos en lo alto. El viernes era su día “preferido”, según manifestó después, porque lo sacaban de la celda y al menos escuchaba voces humanas. Eran insultos. Sus hermanos lo colocaban en medio del refectorio y lo vituperaban uno tras otro, en una dolorosa cura de humildad, mientras todos comían. Muchos consideraban que en él no había más que pose y fingimiento; que se las daba de santo por querer expandir el trabajo de Teresa de Jesús en busca de una relación de amor más directa con Dios, con sencillez y pobreza evangélica. Él se lo creía verdaderamente. Poco que hacer ante eso.


Seguramente San Juan de la Cruz tenía un amor propio muy grande, y era ligeramente testarudo, hosco y hasta arrogante, con esa arrogancia mal fingida de los pobres que tienen que hacerse valer frente al poder. Un hombre así, poca cosa, un religioso más que gustaba de escribir pequeños versos, consejos y dibujos a modo de reflexión espiritual no tendría que haber pasado a la historia. Y de hecho, tras varios meses, él mismo pensó que tampoco valía la pena seguir viviendo, perdida toda esperanza de salir de aquella prisión conventual. Y comenzó a dejarse morir a sus treinta y cinco años.
Pero un día, imagino de esos en que ya el cuerpo se rinde con todo, ya saben, uno de esos días, escuchó una voz que llegó por la rendija de luz. No crean que era la voz de Dios. Allí no hubo milagros de esos. Era un carretonero que pasaba cerca de la celda cantando una letrilla de la época, que decía algo así como: “Muérome de amores, ¿y ahora qué haré?”
De pronto, el cuerpo del preso se estremeció como atravesado por una punta de luz. Sintió el amor. Cualquier migaja de belleza, aunque sea la letra de una mala canción, es capaz de agitar los resortes olvidados en la intimidad de un ser aún con vida. El amor de qué o de quién no era la pregunta. Era el amor del amor. Era como Dios haciéndole el amor. Y para explicarlo, ese hombre desvalido y pobre tenía que recurrir al viejo e inmortal estilo del Cantar de los Cantares bíblico. Tenía que explicarlo como hombre y mujer, con la piel, con el roce de los cuerpos y la sensualidad de los amantes. Tenía que decirlo “con los besos de su boca”.
Allí había otra canción mayor, una historia que contar. Y empezaron a brotarle, en medio de la enfermedad y su cansancio de moribundo, los versos del Cántico Espiritual y algunos de La noche oscura del alma. Sin papel para poder continuarlos, San Juan de la Cruz pensó que ahora sí tenía sentido fugarse, aunque solo fuera para rematar esos versos. Y logró evadirse de la celda, en poco tiempo, casi desnudo, enclenque y ocultándose entre las sombras, en busca de más tiempo de vida. No hay nada más fuerte que un hombre con un solo motivo que le permita albergar la posibilidad de sobrevivir al horror, escribió el psiquiatra Viktor Frankl, quien sobrevivió asimismo a los campos de concentración. Y no hay motivo más grande que el amor.







Extracto de la catequesis de Kiko Argüello sobre este poema

Dice: "En esta noche oscura, con ansias, en amores inflamada". Habla de la noche del sentido. Como hacemos una idolatría de nuestros gustos, de nuestros sentidos entonces el Señor mismo nos quiere llevar a una unión con Él, lo que está haciendo con nosotros. Dios, lo que decía antes Carmen, ha llevado a su pueblo al desierto. Hoy muchos exégetas dicen: ¿cómo es posible que Israel haya podido construir esta obra maestra, desde el punto de vista humano hablo, este prodigio que se llama la Torah, el Génesis? El Génesis es una de las cosas más impresionantes desde el punto de vista poético, cultural, etc. llamadle como queráis es el relato de Adán y Eva. Ellos, los exégetas estudian los relatos desde todo punto de vista. Dicen pues, ¿por qué pudo Dios inspirarles, con el Espíritu Santo, claro?.. El Génesis está escrito más tarde, en la época de Nehemías cuando Israel, después de haber tenido un encuentro con Dios, se piensa sus orígenes. Bien, pues ¿qué dicen ellos? Israel ha tenido una experiencia nupcial, ¿dónde? En el Monte Sinaí. A Dios nadie le ha visto jamás, Israel no sabía nada. Cada pueblo tiene su religión y se la inventan. Hay religiones mejor inventadas y otras peores de un sentido religioso que Dios ha puesto en el corazón del hombre. En el animismo han pensado que el árbol tenga un alma, las piedras tengan otra alma como tienen las religiones más antiguas. La montaña tiene su alma, pueden hablar con la montaña y pueden hablar con el árbol, pueden hablar con los animales. Bien, esas son cosas que cada uno puede inventar lo que quiera. Israel tiene una experiencia nueva: Dios interviene, no tienen que inventar cosas, es Dios el que aparece. Lo que sabemos de la revelación. Bien. Entonces lleva a su pueblo y hace con ellos una experiencia nupcial, los lleva al monte y Dios aparece como un esposo, Israel como la esposa. El hombre y la mujer.

Digo esto porque S. Juan de la Cruz nos va a decir... Dios va a espiritualizar toda la revelación y va a decir porqué nos ha creado y S. Juan de la Cruz habla de las "bodas místicas con Dios", de nuestra alma, de nuestro espíritu. Entonces ¿cómo puede hacer Dios para que nosotros dejemos de enamorarnos de las cosas y nos enamoremos de Dios? Entonces Dios dice que te mete en una noche, el mismo Dios te mete en una noche, Carmen habla del Exilio, Dios mismo, en una noche oscura, la noche con ansias. Y al mismo tiempo tienes un ansia de felicidad que el mundo no te satisface. "Con ansias, en amores inflamada", es un mal de ausencias que llaman los poetas, cuando una chica está enamorada de un chico verdaderamente enamorada y de pronto le falta el chico, te falta, te falta algo... estás deseando que cuando aparece el chico es como si entrara el sol en la habitación, si es que habéis estado enamorados alguna vez. Y el amor humano no es más que un pálido reflejo, palidísimo de Aquel que inventó el Amor. ¡Cómo será el amor de Dios cuando el amor humano, el amor es algo tan maravilloso, perfecto! Y es todo químico ¿eh? Casi químico es el amor humano según están descubriendo los científicos. El amor espiritual, cuando ese amor se espiritualiza eso ya es más serio, eso es el matrimonio cristiano: el aprender a morir el marido a la mujer y la mujer al marido.

De todas maneras lo demoníaco del mundo no te invita a pasar del amor natural al amor espiritual y en cuanto tiene el hombre que morir a la mujer, entonces te dice: ¿por qué tienes que morir? No hombre, no aguantes a esa vieja, te dice el Demonio, porque el demonio está ahí intentando deshacer todo lo que es de Dios, es el anti-Dios, es el Dragón, es la Bestia contra el Cordero. Es una batalla en la que estamos nosotros: los hijos de Dios que dice Jesucristo en el Evangelio y los hijos del maligno. Los hijos del Reino y la cizaña. Esto está muy en relación con todo lo social que vamos a hablar. Algunos quieren hacer el reino de Dios aquí y no admiten que haya cizaña, se convierten en fascistas, se hacen dictaduras y Dios no ha dicho eso, ha dicho que aquí hay que admitir la cizaña en el mundo. Es Dios el que al final... dejadla que crezca, no hay que quitarlos y meterlos en la cárcel a todos y aquí hacer una especie de teocracia. El cristianismo en ese sentido es otra cosa.

Acabo. Dice: "en una noche oscura". El Señor cómo nos puede quitar del placer, del gusto, de la perversión y llevarnos a Él. Va a ayudarnos. Hay tres noches dice él que son como las tres etapas del Camino. Subir al monte Carmelo. La 1a noche es la noche del sentido. Hay una 2a noche que es la noche de la fe y hay una 3a que es Dios mismo, nube y oscuridad le rodean. La 3a noche que es la noche de unión espiritual, mística, Dios aparece como un alba pero Dios nos va a llevar a este encuentro con Él. Lo más importante, yo he querido hacer una parte del canto, la última parte no la he hecho. Dice: "En una noche oscura, con ansias, en amores inflamada, ¡oh dichosa ventura!, salí sin ser notada, estando ya mi casa sosegada. Parece que Dios te mete en una depresión, te mete en un tinglado y que sufres un poco que se hace como de noche y cuando te das cuenta Dios mismo se ha servido de esto y he salido de esta noche sin darme cuenta y algo había pasado en mi corazón porque estaba mi alma sosegada y ha sido una acción que Dios ha hecho contigo. Interesante saber que cuando Dios quiere actuar con tu alma, no puede hacer nada si tú no quieres porque Dios se ha crucificado en la cruz. Otro problema muy profundo, la debilidad de Dios, la debilidad de Dios para contigo. La debilidad de Dios es más fuerte que la fuerza de todos los hombres. Entonces ¿Dios no puede hacer nada con tu hija, con tu hijo? No. Ese es un misterio muy grande, podemos pedirle a Dios pero Dios no puede pasar los límites de nuestra libertad porque Dios no puede negarse a sí mismo, deja de ser Amor.

Entonces en hombre ¿puede matar a Dios? Si. El hombre ¿puede destruirlo todo? Si. El hombree ¿puede destruir una familia? Si. Tu hija ¿puede ser destruida por un casado que la violenta y le destruye toda su sicología sexual y ya será una mujer destruida? Si. Si, a un niño se le puede destruir de pequeño con eso de la pedofilia y ya queda totalmente destruido y él mismo será después un pedófilo y lo transforman en un monstruo, sí. ¿Se puede destruir? Sí, se puede destruir. La Gioconda ¿puedo llevar un poco de ácido al museo? ¿puedo hacer así sobre la Gioconda y destruirla? ¿y ya no se puede reconstruir más?, Si. Jamás se podrá reconstruir. Eso se puede hacer. ¿Se puede destruir el ser humano? Si, si. ¿Una persona puede coger a tu niña preciosa y la puede destruir para toda la vida? Si. Hay personas por ahí exhibicionistas que hacen cosas horribles. Esto es la verdad. ¿Se puede destruir a un pueblo entero? Sí. ¿Se puede hacer que en Rusia haya cuatro millones de niños? ¿Y qué es lo que habrá en esos orfelinatos si no se cree en Dios? ¿Qué se hará con esos niños? ¡Qué monstruosidad serán esos sitios! ¿verdad? Sí, si. Una cosa curiosísima. ¿Se puede matar? ¿se puede cortar una mano a una persona y quedar manco toda su vida? Si. Es que esto es muy interesante que seamos conscientes realmente qué es la vida.

Podía ser una maravilla la vida, ahí tenéis la naturaleza, ahí está el equilibrio impresionante, eso que decía Carmen, la justicia, que se ajusta a lo que Dios ha creado porque en el orden y en el universo hay una armonía. Yo, como pintor os puedo decir que ahí hay una fórmula matemática impresionante. Este humano está hecho todo de fórmulas matemáticas: la proporción que hay entre la frente, el pelo, los ojos son todos fórmulas matemáticas de belleza. No se dan cuenta muchas chicas cuando se arreglan la nariz que han destruido esas fórmulas y después envejeciendo se hacen monstruos. Eso es el mundo. El pecado es destruir la armonía. Todo pecado tiene en sí mismo su castigo, es destrucción de la armonía de Dios.

Bien. Entonces: "En una noche oscura, con ansias, en amores inflamada, ¡oh dichosa ventura!, salí sin ser notada, estando ya mi casa sosegada. A oscuras y segura, por la secreta escala, disfrazada (hay una escalera que está subiendo y ya el alma está disfrazada de las virtudes, de la fe y la esperanza) ¡oh dichosa ventura a oscuras y en celada, estando ya mi casa sosegada. En la noche dichosa, en secreto, que nadie me veía, ni yo miraba cosa. sin otra luz y guía, sino la que en el corazón ardía. En el libro viene lo que significa cada frase. Aquesta me guiaba (la noche) más cierto que la luz del mediodía, adonde me esperaba, quien yo bien me sabía, en parte donde nadie parecía. Todo esto para decir: ¡Oh noche que guiaste! ¡oh noche amable más que la alborada! ¡oh noche que juntaste Amado con amada, amada en el Amado transformada!. O sea que hay un secreto de amor. Yo quería deciros con esto que en el proyecto de libertad que Dios empieza contigo hay una acción de amor y a ti no te gusta porque sufres un poquito y le dices: ¡no me da la gana! y se acabó, Dios no sigue, y no sigue y vuelves a tus charcas como los cerdos. Es el misterio inmenso del amor de Dios y el misterio de la libertad humana y te metes en el agujero negro.

¿Qué podemos hacer? Es el misterio inmenso de la libertad humana. En el misterio de la iniquidad, en el misterio de la maldad humana, brilla una luz profunda como en un agujero negro de una galaxia. Esa luz ¿qué es? ¿qué grande es Dios, que siendo Dios nos dejó libres y permite que el hombre se pervierta hasta extremos indecibles. Entonces, en esa perversión infinita hay al mismo tiempo un misterio del amor de Dios. Y este misterio solamente se puede entender en la cruz de Cristo, que se crucificó por nosotros. Eso que decía Carmen que en el Monte, fuera de las murallas, había un hombre crucificado entre los ladrones, y era Dios mismo. Ese hombre crucificado es Dios. SE CRUCIFICO. ¿Cómo es posible que la gente se mate? ¿Cómo se suicidan? Deben estar locos, porque algo muy malo debe haber después de la muerte cuando Dios mismo se crucificó por nosotros, vino a destruir nuestra muerte.

 
Gracias a Dios que El ha hecho un camino en la muerte y ahora la muerte es dulce para sus santos. El Señor ha preparado para nosotros el cielo. Ayer hemos leído de San Pablo “buscad las cosas de arriba, donde está Cristo”. No mirad las cosas de la tierra, pensad en el cielo donde os espera vuestra madre, donde están nuestros seres queridos, donde el Señor ha preparado... Aunque no sabemos si están porque solamente sabemos de los santos que están en el cielo, de los demás no lo podemos afirmar ninguno, porque es Dios solo quien juzga las acciones de los hombres. “¡Ah!, pero Dios es muy bueno” ¡Atención, atención! Dios no puede reirse del sufrimiento de los pobres, la vida no puede ser una mandanga. ¡El sufrimiento de las personas! ¡matar a la gente! “Si al final Dios es muy misericordiosos ¡que más da!” ¿Pero qué dicen? ¡Por favor! La muerte es una cosa muy seria, Cristo crucificado es algo muy serio, tu mismo sufrimiento es algo muy serio, la vida es muy seria, no es un aquí pasarlo bien. Solamente los necios pueden pensar así, los estúpidos. Los necios, el necio solamente piensa en el dinero y en pasarlo bien. El necio es un orgulloso al que nada se le puede decir, no le corrijas porque te odiará. Corrige al sabio, que te lo agradecerá.

Bien. Pues vamos a cantar entonces este canto.

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