miércoles, 4 de octubre de 2017

Los Motivos del Lobo Rubén Dario

Según las Florecillas de San Francisco, el lobo de Gubbio era un cánido feroz que asolaba la ciudad italiana de Gubbio, situada en Umbría, en la actual provincia de Perugia. De acuerdo con la narración, este lobo europeo era un depredador que había devorado tanto animales como personas. Presentaba tal ferocidad que nadie se aventuraba siquiera a salir de la ciudad. Francisco de Asís, movido por su compasión a los habitantes del lugar, actuó motu proprio sin que solicitaran su intervención: buscó al lobo y lo conminó en nombre de Cristo a no hacer más daño a nadie. Apenas el «santo de Asís» trazó la señal de la cruz, el lobo cerró la boca, dejó de correr, se acercó mansamente, y se echó a sus pies. Conducido por Francisco hasta la ciudad, el lobo vivió en ella durante dos años hasta su muerte por vejez. En alusión a este episodio, el lobo aparece en ocasiones como un emblema de Francisco de Asís,​ y el conjunto del santo y el lobo se observa en variadas representaciones iconográficas. La riqueza simbólica del relato se refleja en la multiplicidad de análisis y reelaboraciones de que fue objeto.



En la literatura, el relato inspiró la poesía de Rubén Darío titulada Los motivos del lobo. Este poema pertenece a la etapa de madurez literaria de Rubén Darío y fue publicado en Mundial Magazine en 1913, tres años antes de la muerte del autor.​ Por su carácter dramático y su estructura en siete partes, este poema es considerado una de las composiciones que demandan del intérprete un elevado nivel técnico y capacidad histriónica.
En la poesía, Rubén Darío se refiere al animal como el lobo de Gubbia. Se desconoce la razón precisa de la diferencia en el nombre de la localidad.​ Asimismo, la narración poética se aparta del contenido original de las Florecillas de San Francisco puesto que, en la poesía, el lobo retorna más tarde a su estado salvaje inicial como respuesta a las actitudes de los hombres.



La única variante notable entre el capítulo de las Florecillas y la versión dariana, reside en el desenlace. Según aquéllas, el hermano lobo murió de viejo, de lo cual se dolían mucho los ciudadanos, porque viéndolo andar tan manso por la ciudad se acordaban más de la virtud y santidad de San Francisco. En cambio, el genio de Rubén [Darío] se rebela contra lo objetivo de la piadosa y poética narración, para imprimir carácter absolutamente lírico a los acordes finales de su poema, haciendo que el lobo regrese a la montaña a causa de la maldad de los hombres.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...